sábado, 20 de agosto de 2011

AL DESCUBIERTO

No sé cómo se consigue olvidar, cuando el recuerdo es tan vívido, tan claro y tan doloroso. No sé cómo se consigue perdonar si estas siendo obligada a dejar todo lo que eres, todo lo que tienes por tu propia existencia, y tampoco se cómo se consigue decirle a los seres que amas que estás muerta, sin que ellos sepan que sigues con vida, pero como si realmente te hubiesen quitado la vida.

Akun me bloqueaba el paso, Akun me miraba desesperadamente, Akun era en ese momento la única posibilidad de seguir viviendo, como de morir para siempre.

Tomó mi guardapelo y lo sostuvo en su mano derecha, muy alto, brillante, como lo recordaba.

-Fue una trampa, tienes razón Renesmee- lo dijo despacio y sin apartar la mirada de mi valiosa joya.

Yo lo miraba sin comprender un ápice, estaba aterrada.

-Daniel y el asunto de El Plunkin Shack Café solo… sólo debía sacarte de casa

Todo aquello estaba comenzando a marearme ¿trampa? ¿Daniel? ¿A qué se refería con…? Las neuronas comenzaron a trabajarme rápida y dolorosamente.

-Siéntate-me ordenó, no había manera de resistir lo que se avecinaba, podía pelear, y el terminaría matándome, aún así, algo lo detenía de pie en aquella habitación. Lo que comenzó como mala idea terminó siendo una catástrofe.

Akun me acuclilló delante de mi, los colmillos comenzaron a pincharme los labios y a hacerlos sangrar.

El enojo, eso es algo que deben controlar, los hará perder aún antes de la verdadera batalla- Escuchaba los ecos de las lecciones de Jasper y no podía contener mi creciente enojo

-Tu familia debió mantenerse al margen, dejar las cosas como estaban, los provocaron y ellos nos enviaron. Creí que podríamos manejar este asunto, entregarte, hacerles frente después y entonces seríamos todos libres, pero ellos son más listos, más listos que nosotros juntos Renesmee- su sonrisa era esa máscara de frialdad

-¿Entregarme?-la palabra había saltado de mis labios sin poderla detener.

-Los Vulturis- dijo y supe que entonces sí moriría.

Akun se puso de pie, se paseo delante de mí aprovechando mi estado de letargo, las frases, los sonidos, las imágenes, golpeaban cada recuerdo y cada nuevo pensamiento. Si esa guardia de vampiros italianos conocía a Akun, entonces Jake estaba en lo cierto. Ellos venían, eran quienes estaban detrás de mi familia, detrás de mi, pero ¿Jacob? Algo no encajaba

>> Acabaron con mi familia, si, supongo que es en lo que piensas, primero terminaron con los Akuntsu y después los kanoê, fue esa estúpida guardia de vampiros de mierda, Aro Vulturi exterminó a mi tribu, el hogar que conocí y después de divertirse con mi madre la envolvieron en una piel de camello, le untaron brea y la usaron de antorcha.

-Yo no…

-Sé que no lo entiendes ahora, pero era la única manera, si Cayo nos dejaba vivir, estaríamos bajo sus órdenes, moriremos igual que tu familia Renesmee, pero queríamos hacer esto, yo necesitaba conocerte

Sus ojos miel me atravesaron haciéndome sentir indefensa y frágil

-¿necesitabas?

-Quizá no lo esté poniendo muy en claro-se mesó el cabello y se volvió a poner en cuclillas delante de mí, nunca me quitó los ojos de encima- ¿no lo sabes?

¿Qué se supone que debería yo saber? ¿Pensaba acaso que era una especie de vidente como mi tía Alice? Alice… los ojos se conectaron, y el sonrió

-Veo que lo intuyes, Cuando vivíamos bajo el techo de esas asquerosas sanguijuelas, comenzamos a escuchar sobre tu familia, Los Cullen, Aro quiere que Carlisle se minimice a cenizas y eso le provoca un asqueroso regocijo, escuchábamos de todo, éramos sus sirvientes y muchas veces –lo admito- les llevamos comida.

>> Fue la niña, Jane, siempre sonriendo cuando estaba a mi lado, siempre “atenta y agradable”

Yo no me podía imaginar una Jane atenta, mucho menos agradable, vaya, no podía imaginarme una Jane que no fuera mortífera en ningún mundo paralelo.

>> Ella te mencionó, Te llamó “La híbrida” desde ese día pregunté por ti, lo más decente que pude, sin levantar sospechas, tu nombre fue lo que me hizo aceptar la misión Renesmee.

-¿mi nombre?- no tenía caso disimular la perplejidad en la que me encontraba sumergida

Akun se sentó con las piernas enroscadas frente a él, me extendió la mano y dejó caer la cadena y el guardapelo en ella, cerró mi puño y por alguna razón sentí alivio, confianza y dejé de temblar.

-Quizá te parezca una locura

-Te aseguro que a estas alturas y siendo lo que soy, nada me parece una locura-le sonreí repentinamente

Akun me miró y respiró hondo.

>> Mi padre me dijo que los espíritus del aire, como nosotros –las aves- no podemos permanecer siempre en libertad, que hay un castigo para aquellos que son consagrados los líderes, y yo era uno de ellos, mi padre también lo fue y su “castigo” había sido encontrar la compañía en una mujer que no podía envejecer, no era humana, pero tampoco era una no-muerta. Mi madre fue una bruja, cuando la quemaron viva mi padre padeció el mismo martirio en su piel. Yo también heredaba esa maldición, encontrar la compañía en un ser diferente que tampoco envejecería.

Muchas veces le pregunté, cómo sería, su nombre al menos… mi madre adivinó el nombre de mi tortura y mis castigo divino, “Todo tiene un equilibrio Akun, tu espíritu es el aire, el de ella es el fuego, su mundo está dividido porqué tu también estás dividido, ninguno puede ser completamente uno, sin renunciar a ser su otro. Su nombre es la mitad de un mundo estable y la mitad de uno desconocido, su vínculo es aterrador y también puede ser mortal. Su mordida será como una brasa si llegase a tocarte y te aniquilaría en un segundo, porque tú morirías por ella.”

Recordé los clic del auto de Akun, recordé la manera en que tía Alice afirmaba sobre un vínculo invisible, pero no podía… los ojos se me salieron de las órbitas. El no sonrió

-Sólo sé que cuando Jane mencionó sobre la híbrida del clan Cullen, y cuando supe que tu nombre era Renesmee, porque tu abuela se llama Reneé y la madre de Edward es Esme, el equilibrio cobró significado. No tuve que pensarlo, la misión era mía. Sentí fuego, no aire, siento fuego cuando me transformo, siento fuego Renesmee, porque tú eres fuego.

El mareo se precipitó, no podía creer que las cosas estuvieran poniéndose tan de cabeza, si pensaba que nada me parecería locura, bueno, había fallado.

-Nos traicionaste-le escupí como si de pronto sintiera odio por haberme fallado.

-No lo hice, tenía que fingir que seguía el plan, Ren, lo tenía que hacer-

¿Ren?

Me miró como si sus ojos tuvieran llamas en las pupilas, me aguijoneaba mirarlo de frente.

-Que encontraras la pluma entre tus cosas esta mañana era todo un plan. Los Vulturis creen que tienen un plan, creen que tienen a su familia, pero yo también tengo uno.

-¿Tú?

-Los demás no tienen porqué morir si yo lo decidió por mí

Así que encontrar a la tribu no había sido un golpe de suerte, los Vulturis los habían mandado a encontrarnos, Akun me había llevado al bar para que uno de ellos pudiera poner la pluma en mis cosas y sacar el guardapelo sin que yo lo sospechara, seguramente alguien a quien Akun si había confiado su secreto, pero exacto no eran todos, no lo sabía si acaso ese uno, y quizá no lo sabía, quizá Akun le había mandado sacar mi relicario sin hacerle saber que la pluma me llevaría a ellos, me traería a solas con él y el me diría todo esto. Recordé al chico que tomó por el cuello el día que volvíamos de Port Angeles.

Quizá ese día querían que fuera el perfecto para llevarme con Aro, y Akun lo había detenido.

Me había tomado unos segundo procesar esa información, procesar todo lo que Akun estaba diciendo, en otras palabras que yo pertenecía a su vida y que él nunca me ayudaría a recuperar a Jacob, no había sido su plan jamás.

-¿Y ahora que sigue?

El móvil comenzó a brillar y a temblar en la palma abierta de Akun, lo miró por un segundo y nunca esperé que la persona a quien el respondiera rezara el nombre “Bella”

Estaba pasmada, sin habla y completamente perdida, Akun me miró con ojos compasivos, se acercó pasos a mi y presionó un botón, no me podía dar cuenta en ese momento de que estaba accionando el altavoz

Fue su voz, la voz de mi madre lo que me trajo a la realidad, solo una simple frase

-Confía en el

Eso fue lo que ella dijo, y a continuación silencio

Akun me tomó por los hombros, como si estuviera intentando revivir una parte de mí que estaba ahí, pero completamente alejada de la realidad, y así era como me sentía, una completa estatua, que no tenía nada en claro, salvo que conocía una sola cosa. Nunca más volvería a ver a mi familia.

Lo siguiente que recuerdo, es a Akun conduciendo a través de insinuantes carreteras, y curvas vertiginosas, sus ojos me escrutaron todo el tiempo, pero lo único que rondaba por mi cabeza y de lo que era consiente en aquel momento era de mis padres, mis tios, mis abuelos ¿Qué pasaba con ellos? ¿Dónde quedaba la unidad familiar en todo eso? ¿Sería que el plan de Aro para terminar con nosotros, por fin estaba dando resultados? ¿Realmente jamás los volvería a ver? Y todo aquello me aplastaba como una losa y me dejaba sumida en ese mundo, del que quería despertar pero no podía.

El cuarto del hotel era tan pequeño que solo había espacio para una cama, un espejo y un buró, Akun encendió la luz y yo por primera vez parpadeé de verdad ante lo que me resultaba conocido. No tenía idea de cuanto tiempo había estado ausente, y tampoco quería conocerlo, sin embargo había que reconocerme un mérito, no había llorado, no sabía porqué no lo hacía pero así era, un caso cerrado quizá, pero mi cuerpo se negaba a llorar, y se complacía con torturarme en mis pesadillas.

Me senté en la cama, y contemplé a Akun salir del cuarto de baño. El se arrodilló delante de mi con el cabello mojado y los rizos pegados a las sienes, llevaba la ropa tan sucia y gastada, que me pregunté si la mía se encontraría en las mismas condiciones.

Entonces el me tomó la mano, y fui consciente por vez primera desde hacía ¿días? ¿Semanas? Akun era todo lo que ahora tenía, las palabras de mi madre se infiltraron en mi memoria “confía en él” había dicho ella.

-¿Dónde están? –pregunté

-Poré, va al norte con Carlisle y Esme, Kapix con Rosalie y Emmett al sur, Ineke al lado de Alice y Jasper al este

>>Ro, sabía que todo esto era un plan, el sacó el guardapelo de tu habitación, la pluma que encontraste es de él, está con tu madre, les dio aviso a la tribu Edward debe estar en camino para reunirse con ellos, Ome lo encontró en compañía de Billy Black

Se me hizo un nudo en la garganta, mi tiempo de letargo no había incluido a Jacob, ni a su familia en el, y me golpeó darme cuenta de que estaba sucediendo. Sin embargo aún había una pieza que no encajaba, y ese rompecabezas era lo que me obligaba a no darme por vencida a luchar, pero ¿porqué luchar? Por mi familia, solo los tenía a ellos para aferrarme, a nadie más.

-Todo irá bien Ren- Akun me susurró

¿Ir bien? Yo no le veía ni pies ni cola a aquella expresión, pero por alguna razón, logró tranquilizarme un instante

-Nadie dejará sola a tu familia Renesmee, debes confiar en nosotros.. sé que no es sencillo y que lo intentas, pero cuidaré de ti, cuidaré de ti siempre que me lo permitas

Y extrañamente aquello me hace recordar “solo lo tengo a él”

-¿A dónde nos dirigimos?

Aquello parece reanimarlo un poco, solo un poco porque esboza una débil sonrisa

-México

Siento que se me cae el alma a los pies, pero me doy cuenta de algo, ya he perdido todo lo que amo por causa de los Vulturis, y no voy a perderme a mi misma, si alguien debe luchar debo ser yo, debo mantenerme viva y así mantener con vida a mi familia, a quienes no han logrado arrebatarme del todo.

El vacio sigue siendo tan grande como un agujero negro en el espacio y ocupa el centro del pecho, estoy hecha un ovillo sobre las mantas de la cama cuando Akun entra a la habitación, son alrededor de las 11 de la noche y lleva una bolsa de “seven eleven”

Leche, pan dulce de caja, burritos y jugo

-Sé que no es mucho pero…

-Es perfecta

Akun ha descubierto que mi ánimo de vivir ha resurgido, porque mi letargo ha desaparecido casi del todo, solo hay dolor en los bordes, pero sigo aquí y no estoy sola. El sonríe

Cenamos en silencio, y devoramos todo, porque no habíamos tenido tiempo para comer, nuestra condición nos hace un poco más fuertes que los humanos, y resistentes ante la alimentación, no me muestro reacia , engullo la comida humana, y casi no noto el sabor de la sangre que le hace falta a mi sistema, como es costumbre en Akun elige mi pensamiento y lo expresa

-Cuando nos asentemos podré encontrar algo para que te llenes- me dice y sonríe un poco.

No sé donde quedó aquella faceta de “estúpido engreido” pero parece que no va a regresar, después de haberme confesado que era algo así como el amor de su vida, que él y yo estábamos predestinados.

Alejo ese pensamiento, Akun está conmigo quizá por aquella leyenda suya, pero yo debo aferrarme a el para seguir con vida y porque de alguna manera tampoco concebiría que le hicieran daño por mi culpa.

Me tumbo en la cama con el estómago repleto y los ojos cansados, y de pronto sé que no hay más que una cama en la habitación, no había sido consciente hasta ese momento, Akun extiende una manta en el suelo, y me rebota la sensación de descobijo, desamparo y la noche, terrible y absurda que para ser una híbrida no debería afectarme, pero lo hace…

-No tienes porqué dormir ahí- le digo sin ser muy consciente de lo que he hecho

Akun me mira como evaluando las posibilidades, pero a pesar de que sé que ha sido un instinto y quizá un acto egoísta, no quiero tener pesadillas, y una mano que me reconfortara, una mano que estuviera pasando el mismo dolor y pena que yo me consolaría en cualquier momento.

“ahora solo lo tienes a el”

Akun se mete en la cama y yo me siento tranquila

“ahora solo lo tienes a él”

Mi cuerpo se amolda a su torso y mis manos buscan las suyas

“ahora solo lo tienes a él”

Sus brazos me envuelven en un calor reconfortante

“ahora solo nos tenemos el uno al otro”

Y no tuve pesadillas después de aquella noche.

La mañana siguiente se siente un ligero cambio en el ambiente, haber estado juntos nos sirvió a ambos para desahogar las penas y la angustia, y para recordarnos que estamos juntos, peleando cada uno su propia batalla.

Intenté comunicarme con mis padres y con mis abuelos, pero solo es tía Alice quien atiende el teléfono, no sabe nada de su familia y cree que es mejor perder la comunicación entre todos, eso les dará mas complicaciones a los Vulturi para encontrarnos.

La tía Alice lo había visto todo después de partir con Akun, la relación, los vínculos, todo y supo que debíamos huir, sin embargo me dijo que ella me haría saber que estaban con vida y yo le creí.

.

.

..

Akun abre la puerta del pequeño departamento en el que nos alojamos, tiene unas bolsas grandes que citan “Walmart” dentro hay Leche, Jugos, Burritos y pan dulce de caja, me hace reir aquella comida.

Mi cabello lacio y rojo fuego cae por los hombros cuando me acerco a ayudarlo a desempacar.

-Lo siento. No he tenido tiempo de pasar a buscar tacos- se rie- y pensé que quizá esto aliviara un poco el ambiente

Y lo hace, porque fue exactamente lo mismo que consumimos la primera noche que dormimos juntos, hace tres meses.

Tres meses hace que vivimos en el Distrito Federal en México

Tres meses de cambiar nuestras identidades por Carlie Masen y Nathaniel Smith

Tres meses sin saber nada de mi familia, de vivir con Akun, de saber que “solo lo tengo a él”

3 comentarios:

melissa dijo...

vii me faciana la historia es totalmente diferente a las que e leido pero me gusta mucho
creo que eres muy buena escritora
me muero por sabes que pasa en el siguiente capi que pasaro con todos!!!
me gustaria que no dejaras tanto tiempo sin publicar peroo si n puedes te entiendo
espero estes muy bien
saludos y besos

Noelle dijo...

Simplemente Ame el capitulo. Estoy que me muero de la intriga con jake!!
donde esta??
Que pasa por su cabecita??

Y ahora Renesme y Akun sólitos???
Se portaran bien este par??

El querrá darle mucho amor??

jaja

Logras que me vuelva loca por la espera!!

Besos y mucha inspiración!!!

¡¡bamh!! dijo...

Wow! Chance hasta son mis vecinos. Me late que un dia de estos googleo a la Ness y la rebano en dos XD
Jajajaja XD bromas