domingo, 26 de febrero de 2012

"GRANADA"

Mi padre me condujo un par de metros entre la espesura del bosque. Abrió la puerta del famoso volvo plateado que le había hecho ganarse el corazón de mi madre y al introducirme en el asiento me sentí a salvo.

En cuanto estuvo dentro del auto, comenzó a mirarme con urgencia. Era obvio que sabía lo que ocurría dentro de mis pensamientos. Aún así traté de detenerlo:

-Te he dicho millares de veces que te alejes de mi mente- le escupí clavando la mirada en la carretera.

-Bueno hija, tu mente no habla, ni grita precisamente- rompió en una pequeña risa musical que me hizo sentir fuego en las venas.

-¿Ah no? ¿Entonces qué es lo que hace según tus prodigiosos dones? – le increpé ofendida

-Verás cariño, siempre he tratado de mantenerme al margen de tus pensamientos, pero sucede que tu mente gime como si estuvieran clavándote un puñal en el pecho. Es algo… complicado ignorarla.

-Y por complicado debo entender que es INEVITABLE para ti no husmear en mis pensamientos- respondí sínica

Mi padre se río.

-Entiendes el punto- dijo entre risas

-No sé cómo mamá fue a fijarse en ti, eres detestable ¿lo sabes?- me crucé de brazos y lo miré fijamente

-Algo me han dicho- el vampiro no quitó la sonrisa que le enmarcaba el rostro, hasta dos segundos después cuando el silencio había sustituido las risas.

>Realmente cariño, no es que disfrute fisgonear en tu vida sentimental, ¿a qué padre le gustaría? Tampoco es que me resulte imposible mantenerme fuera de tu mente. La verdad es que eres mi hija Renesmee, todo lo que te suceda es importante para mí

Entendía, claro que lo hacía. Aunque me hubiese gustado muchísimo más que mi padre no tuviera que enterarse de mis dilemas amorosos. Vamos, ni yo misma comprendía hasta qué punto todo estaba “razonablemente bien”

-Debo reconocerle su valentía, Jacob nunca se ha dejado intimidar, y me sorprende que no haya retractado su culpa dentro de los hechos- Edward comenzó a aminorar la marcha del auto.

A mí seguía sorprendiéndome aquella parte de la conversación de nuevo todo se dirigía al mismo punto ¿Qué culpa tenía él?

-Tampoco puedo decir que me sorprenda que te haya besado- mi padre suspiró- después de todo, sigues siendo su impronta, aunque no parezca que la leyenda tenga tanta fuerza ahora, pero…

El vampiro vaciló y me dirigió una mirada mezcla de la confusión y la intriga.

-… lo que si me tomó desprevenido fue le regresaras el beso- concluyó y entonces desvió la vista de mi rostro a la carretera.

Quizá era demasiado confuso ser el padre inmortal de una híbrida con once años de edad y veinticuatro de madurez. No podía culparlo. Tampoco quería profundizar detalles de esa naturaleza con mi padre. Hice lo que mejor se me daba últimamente: Evadir

-Papá, lo que menos necesito es una plática de moral sentimental. Sin ánimos de ofenderte, se nos oxidó ese tema hace muchos años

Edward mantuvo su concentración y no se volvió a reír como yo esperaba. Sin embargo, yo sí lo hice.

-Quizá se nos haya oxidado porque nunca tuvimos que pensar precisamente en que podías enamorarte de alguien más- refunfuñó- creo que deberías hablar con Akun sobre esto.

La seriedad en su rostro me hizo sentir ganas de vomitar. Únicamente porque era la verdad, no podía seguir ocultándole las cosas a Akun, ya había huido una vez de él y de su cuidado, si quería que mi vida sentimental funcionara como debía, tenía que ser sincera. La razón que poseía mi padre me llenó de ira.

-¿Te contó como sucedió?- me preguntó

Hice el intento por deshacerme de mi cinturón de seguridad, la veloz mano del vampiro me lo impidió

-Creo que ya has oído bastante de nuestra conversación. Debido a que mi mente gime. No sé qué es lo que Jacob omitió decime que evidentemente tú conoces.

-Seth nos contó como recuperó la memoria, pensé que sería lo primero que él te diría, pero veo que ha enfocado la conversación a retirarse de la competencia.

Le lancé una mirada furica, el me la devolvió en un gesto de disculpa.

-¿Y bien?- le reproché – cuéntame

Mi padre suspiró y tomó con calma una curva en la carretera. Me percaté de que no recordaba cómo había llegado hasta los Acantilados de La Push. Seguramente porque correr al lado de Jacob y la adrenalina que había tenido en el aquel momento me habían hecho ir tan deprisa que desaparecieron todos los escenarios existentes.

-Libeth- pronunció despacio su nombre como si temiera molestarme o pensara que a su sola mención podría echarme a llorar o a morder a alguien- estaba cuidándolo, Billy también permanecía en la casa, claro era de suponerse que dondequiera que Libeth fuera ahí también estaría el padre de Jacob. La compulsión es un arma muy poderosa. ¿Entiendes por qué la guardia la ha querido desde su nacimiento?

Odiaba a la híbrida que se había enredado con Jacob, la que había participado en la destrucción de mi vida, personal y familiar; pero al mismo tiempo me compadecía de ella. Aro, Cayo y Marco habían usado la vida de Libeth a su antojo, la habían tejiversado hasta convertirla en un ser sin escrúpulos que se arrodillaba como chinche ante sus amos. Pobre estúpida.

Mi padre frunció el ceño ante mis ofensas pero no dijo nada sobre ello. Metió cuarta velocidad y continuó:

-Seth, Sam y la manada piensan que Libeth sabía que Jacob despertaría aquel día, por eso decidió que era el mejor momento para desaparecer. Sue llegaría a comer con ellos, Seth estaría ahi unos minutos más tarde para hacerles compañía. Esperarían a Charlie hasta la hora de la cena y después se irían.

>Cuando Sue llegó, Libeth y Billy no estaban en la casa, Jake seguía en su estado de coma, y aquello le pareció lo más extraño a ella, pensó que no podrían haber ido lejos sin nadie que cuidara a Jacob, más cuando Seth arribó en la casa una media hora más tarde, ella estaba ya desesperada.

>Seth fue a buscarlos por los alrededores, nadie los había visto. La manada estaba descansando y no patrullando y Sam había ido a Port Angeles a conseguir mapas del estado. Ningún lobo en la reserva había estado vigilando.

>Cando Seth regresó a la casa de los Black, Sue había perdido completamente el control, además de no encontrar a Billy ni a Libeth, Jacob se debatía en espasmos que le hacían retorcerse como lombriz.

>La manada no tardó en aparecer, nadie había visto a la híbrida ni al padre de Jacob, Sam acababa de regresar a la reserva cuando Charlie llegó a la casa, y fue tu abuelo el que descubrió la verdad. Los lobos estaban pensando que los Vulturi habían intervenido, pero no cuadraba que si ellos hubiesen sido los autores del crimen, hubieran dejado a Jacob. Entonces Charlie encontró la nota.

Sentí cada parte de mi cuerpo tensarse de una manera espectacular, estábamos entrando en Forks, cuando comprendí hasta qué grado deseaba venganza. Ya no únicamente se trataba de mí, o de mi familia, las vidas de todas las personas a las que amaba se habían comenzado a desmoronar a mí alrededor, yo era algo así como su augurio de mala suerte.

-¿Libeth dejó una nota?- formulé la pregunta obvia, pero que necesitaba ser respondida. Porque en efecto Jacob no me había contado nada de los hechos anteriores a nuestro encuentro. Nada de su “despertar”

Mi padre asintió

-Sam dice que únicamente citaba: “Despertará” No puedo decir que lo siento. Encuéntrenos

Maldita perra, pensé. Era cierto me estaba pasando de grosera, y sabía que aquellas palabras “anti sonantes” no la causaban la más mínima gracia a Edward Cullen

-El resto es que Jacob despertó, y cuando lo hizo sabía exactamente que le había sucedido, desde el momento del rapto hasta que cayó inconsciente en su propio taller de México. Su cerebro no estuvo tan embotado después de todo, trabajó para hacerlo recordar exactamente cada suceso y después cuando su vida estuvo en orden nuevamente le dejo despertar.

>Es más o menos lo que la ciencia diría, ya sabes, lo que Carlisle respondería. Aunque tu madre piensa otra cosa.

Entramos en el camino empedrado que conducía a nuestra casa, las farolas que tía Alice había colocado para iluminar la entrada -cuando mi madre había venido a conocer a la familia por primera vez cuando era humana- estaban fundidas y rotas; sin embargo las luces en el interior de la casa refulgían como la llama de una esperanza.

Detecté una figura inmensa y negra posada sobre las ramas de uno de los árboles más cercano. Por el modo en el que nos estudió supe que se trataba de Ro montando guardia oficial a las puertas de la mansión.

-¿Qué es lo que cree mi madre?-pregunté arriesgándome a que quien estuviera dentro de la casa, escuchara nuestra conversación. Necesitaba disipar dudas

Mi padre estacionó el volvo justamente en la entrada y apagó el motor. Cando la llave del auto estuvo en su mano me respondió:

-Bella cree que Libeth sumió en ese sueño a Jacob y ella misma le provocó esa especie de “coma” también piensa que lo obligó a recordar y despertar el día más conveniente para llevar a cabo su misión.

Aunque me llenaba de terror todo aquello, sólo podía pensar en una cosa. Si Libeth había hecho todas esas cosas, si era capaz de manipular la mente de un ser mitad humano de aquella manera ¿Ante qué clase de nuevo monstruo nos encontrábamos ahora?

Edward asintió leyendo mí mente y dijo: - Es exactamente lo que tu madre teme.

Sentí un frío repentino correr por mi cuerpo desde la planta de los pies, hasta la coronilla de la cabeza y tirité

Y pensar que había llegado a sentir compasión por ella.

Justo en aquel momento se abrió la puerta y la figura imponente de mi tío Emmett se recortó contra esta.

-Debemos entrar, ya no debemos perder tiempo.

Antes de que se levantara coloqué una mano en su brazo.

-Gracias papá- le dije y él me respondió con una sonrisa torcida – debo pedirte un último favor.

-Lo sé cariño, espera aquí. Le diré que venga- contestó y salió prácticamente volando del auto.

Ese vampiro era incapaz de dejar de leer mi mente. Sonreí aún cuando se inmiscuía en mis pensamientos, porque le había echado tanto de menos, había estado sola y perdida y claro para Edward siempre sería su princesita, la diferencia era que yo ya no me sentía como una.

Me abracé a mí misma, estaba culpando a Libeth por la clase de monstruo que era, ¿y yo? Yo no tenía nombre, había asesinado por mi voluntad. Pero ahora tenía la oportunidad de remediarlo, sí podía erradicar el mal que había

No podía seguir viviendo en un pasado de culpas, traición y oscuridad. Debía moverme y no quedarme estancada. Necesitaba aniquilar a los Vulturis, estaba hambrienta de su sangre, y eso – aunque sonara a una especie de película gore- me hacía sentir… complacida

Sus nudillos tocaron el vidrio del automóvil y me ofreció una sonrisa cálida y una mano que me sostuvo en pie hasta poner los pies en tierra firme. Hasta ese momento me di cuenta que había pasado un torbellino por mi vida y que a partir de ahora era una nueva “persona” que había elegido un camino y mis actos eran distintos, por lo tanto mi destino había cambiado su rumbo. Una historia diferente.

Akun me envolvió en sus brazos y me dejé llenar por su calor, me hundí en su pecho y aspiré su aroma a canela y a limón, a aire puro. Eso representaba él para mí. Oxígeno.

El enterró el rostro en mi cabello, mi cabello dañado por el peróxido de tantos tintes y productos estéticos, eso parecía no importarle, apretó su abrazo y besó mi frente tomándome el rostro entre sus manos.

-¿Todo está bien?- me preguntó

Quizá Akun no sabía que si tuviera de qué preocuparse yo no estaría reaccionando de ese modo, me llenó de alegría saber que sus sentimientos por mí no habían cambiado. El estaba dispuesto a renunciar a todo, únicamente por nuestro futuro – o por el mío solamente-

Asentí con la cabeza y apreté los labios. Mi padre me había “aconsejado” prudentemente contarle la verdad. Y yo sabía que era lo mejor que podía hacer; sin embargo no me atrevía. No sabía cómo reaccionaría mi novio ante esa confesión. Tenía que dejar las cosas en claro

-¿Qué te preocupa?- inquirió buscando mi mirada

-¿Tu y yo… ¿Qué título le ponemos a esta relación Akun? Porque he estado auto nombrándote mí novio y yo…

Empecé a agitar las manos y a bailar los ojos de un lado a otro. Él me volvió a tomar el rostro entre las manos. Y me sonrió

-No se necesita un título oficial para nuestro compromiso Ren, pero de hecho, yo también te he estado llamando así a tus espaldas

Me reí y el me envolvió en sus brazos

-Cuando te fuiste pensé que jamás volvería a tenerte de esta manera- susurró

Su mentón se apoyaba en la coronilla de mi cabeza

-¿Akun?- le pregunté despacio

-¿Sí?- respondió y me separó de su cuerpo para tener un total acceso a mis ojos- Hay algo más ¿cierto?

Noté su tensión como si fuera la mía propia. Ahí iba, debía ser sincera, estábamos juntos en esto y no podía permitir que nuestra relación se viera afectada por lo sucedido con Jacob.

-Ja..- dudé en llamarlo por su diminutivo cariñoso o su nombre de pila, opté por lo segundo, quizá lo primero nos llevaría a falsas suposiciones- Jacob, él…

Me sentía incapaz de pronunciar “me besó” porque no sería la verdad. Akun me miró de nuevo y cruzó los brazos sobre su pecho, no pestañeó un instante hasta que yo volví a hablar:

-Nosotros… - Eso era lo correcto- Nos besamos.- dije aún sabiendo que aquello podía presagiar una tormenta en nuestra relación acabada de empezar

Akun no se relajó, pero su mirada se suavizó ante mi confesión. Y dijo:

-Antes de irte me dijiste que tu elección era yo…

-Eso no…- iba a interrumpirle cuando me pidió con una mirada suplicante que no lo hiciera y le dejara continuar

-Y aún creo en eso Ren, no puedo decirte que no siento ni una punzada de celos, porque entonces estaría diciéndote que no me importas.

>Lo que quiero es que veas y pienses como yo lo hago en este momento. Tú tenías una historia mucho antes de que yo apareciera. No puedo ignorar el hecho de que has pasado casi toda tu vida a su lado.

>Quizá debía ser así, únicamente para que pudieran poner fin a su historia y comenzaran cada uno por su lado una nueva.

>Y algo más – liberó sus brazos y me tomó por los hombros con suavidad- Si ese perro te vuelve a tocar de hoy en adelante, le rompo la cara.

No sabía si reírme o temer por sus amenazas, ese era el Akun que me había llevado al bar, que me había comenzado a conquistar despacio y arrogantemente. No me reí y me lancé a sus labios.

La manera en que nuestras bocas se encontraban era increíble. Podíamos bailar al unísono en medio de ese beso, no podía pensar en nadie más que en Akun y en su cuerpo pegándose al mío, en sus manos que me sujetaban con fuerza, una mi espalda y otra enredada poderosamente en mi cabello. Aquel beso borraba cualquier vestigio del anterior.

Me recosté en su pecho mientras sus manos bajaban y subían por mi espalda.

-Tienes razón- le dije- Te he elegido a ti. ¿Y sabes por qué lo he hecho?

Akun inclinó el rostro para poder verme sin dificultades, le toqué la mejilla y al instante el cerró los ojos.

-Nadie me ha obligado a enamorarme de ti. Has sido únicamente tú.

-Yo también cargo con una leyenda- respondió

-Y yo no sabía de su existencia cuando me enamoré de ti

-Te lo dije no mucho después- me miró inquisitivo

-Supongo que tampoco sabes cuando fue que comencé a enamorarme de ti- respondí con una sonrisa

-Quizá sería bueno que me lo dijeras- una sonrisa pícara se formó en su rostro

-Creo que fue desde que me llevaste a conocer a “Daniel” – hice unas comillas en el aire cuando mencioné el nombre del otro metamorfo mexicano, la coartada de Akun para registrar mi cuarto y tomar el relicario, la coartada para escapar con él.

-Entonces… ¿eres masoquista?- sus cejas se levantaron de una forma muy graciosa y yo reí

-Tal vez… - hice una pausa y le señalé el pecho con el dedo índice- te portaste como un cerdo ese día

Akun levantó las manos en señal de inocencia

-Hey, dame algo de crédito. Soy un ave- dijo

-Un ave asquerosa entonces

-Eso suena mejor- respondió capturándome de nuevo entre sus brazos

>Sé que no será fácil olvidar pero…- comenzó a decir

-Nadie te hará las cosas difíciles – le dije intentando que leyera entre líneas el implícito ni Jacob ni yo seremos un problema para esta relación

Nuestras miradas estaban conectadas cuando dijo:

-No es por mí por quien me preocupo

-¿?

-Es por ti, no quiero que te lastimen- declaró solemne

-Nadie me lastimará- suspiré- La única manera de salir herida de esto sería sí… tú te fueras…

Akun tomó una de mis manos entre las suyas y la pegó al lado izquierdo de su pecho

-Nunca lo haré, a menos claro, que tú me lo pidas

La certeza en sus ojos era tal que me sentía enferma, aunque mi corazón quería gritarle que le amaba, algo dentro de mí no me dejaba externarlo, simplemente era como si una barrera se hubiera instaurado entre mis cuerdas bucales.

-Yo… Yo te... te...- intenté decirlo pero el colocó su dedo índice en mis labios

-Shh, shh, tú me quieres- dijo- y eso me basta- su mirada fue dulce y después una sonrisa asomó en la comisura de su boca- … por ahora

>Me alegra que él no te haya hecho un calvario la plática- dijo aún mirándome con dulzura- Estaba muy preocupado por ti

-No es ese tipo de hombre- respondí sintiéndome a la defensiva

>Me ha dicho que yo no tengo la culpa de nada de lo sucedido.

-Enamorarse no es un pecado- me dijo

-No, no lo es

-¿Entonces por qué deberías culparte?- me preguntó extrañado

-No lo sé, quizá por no haberlo esperado

Akun no respondió inmediatamente, tal vez estaba evaluando las posibilidades de que mi teoría fuera cierta. Suspiró audiblemente y su pecho se infló antes de volver a hablar:

-Debo darle crédito por no hacerse la víctima

-El es un buen hombre- respondí. Aún en mi fuero interno sentía la necesidad de proteger a Jacob, no sólo contra los Vulturis, sino también defenderlo de todo lo que pudiera deshonrar su nombre. Me sentí inquieta por ese descubrimiento.

-Tal vez me caería bien si no fuera mi rival- Akun dibujó una sonrisa ladeada en su rostro pero nunca dejó de sostenerme las manos, y cuando mencionó la palabra “rival” noté una aceleración en su cardio.

-No tienes de qué preocuparte, él… se retiro- susurré

Sus largas pestañas negras proyectaron sobras sobre los pómulos de su cara cuando dijo:

-Eso no implica que tú sigas siendo su impronta

Le toqué el rostro

-Lo soy, pero eso no limita mi capacidad para poder tomar una decisión- respondí buscando acunar su mirada entre la mía. Esperando que mis ojos le proyectaran el consuelo que anhelaba y la confirmación de que yo le elegía a él.

-Espero que no nos la pongan difícil- musitó

-La manada quiere recuperar a Billy y nosotros anhelamos seguir viviendo, no hay razón para que nos pongan las cosas difíciles- contradije

Su mirada fue cautelosa y franca cuando dijo –No estoy hablando de los lobos-

-¿?

-Me refiero a nuestros corazones- hizo una pausa y me aderezó un rizo suelto detrás de la oreja- después de todo… los tres tenemos uno.

Yo podía escuchar el violento latido del mío contra el pecho

No me hacía falta ir a la China para sentir el jadeo del de Akun

Y era muy fácil saber que el tercer corazón al que hacía mención era el de Jacob

Sin pensarlo respondí:

-Él no está interesado en enfrascarse en “ridículos triángulos amorosos”- recité con el mismo deje de desconsuelo y petulancia que había usado Jacob cuando pronunció aquellas palabras hacía sólo un par de horas.

Akun me miró con extrañeza

-Y le creíste- sentenció

Aquella frase volvió a hacerme rugir el ánimo. Nuevamente no me detuve a asimilar las cosas antes de hablar

-¿Por qué no habría de hacerlo ahora? Siempre lo he hecho- casi grité

-Ren, alguien que ve partir a una persona, aún sabiendo que una parte de su corazón le sigue perteneciendo no se rinde tan fácil… al menos yo no lo haría- me respondió cauteloso y sin levantar la voz

>El perro tampoco es tan honorable como piensas- sólo cuando terminó de hablar pude notar el enfado que destilaba la voz de Akun.

¿Y si Jacob estaba usando todo lo sucedido a su favor? No sabía si Akun podía tener razón, pero de hacerlo Jake había jugado muy bien sus cartas. Maldición era una estúpida, todos podían jugar con mi mente y sentimientos. Jacob y Akun no estaban excluidos.

Sentí un picor en los ojos. El dolor de la traición podía hacerme llorar un mar en cualquier segundo.

-No quiero pelear por Jacob- le amenacé, quería pegarle, quería llorar, gritar. ¿Cómo podía haber caído en la trampa de Jacob, en caso de que hubiese existido una? Me dolía pensar en ello y me llenaba de rabia que Akun hubiese sido quien lo descubriera.

>No quiero pelear por él, ni ahora, ni nunca- le dejé bien en claro

-Ren, lo siento- me respondió y me tomó por un brazo- No quiero hacerte daño

-¡Entonces no lo hagas!- le grité ofendida

Era increíble que en nuestro primer día oficial como “novios” discutiéramos por un “ex” ¡Vaya! Y eso que nosotros éramos seres fantásticos. Me preguntaba cómo sería nuestra relación de ser simples jóvenes adolescentes

-Lo siento amor, perdón- me tomó en sus brazos y yo no lloré por puro orgullo

-No vuelvas a desconfiar de mí- le pedí con súplica en la voz

-Te lo prometo- susurró y me besó despacio

El hecho de que me hubiera hecho desconfiar de la honestidad de Jake me llenaba de dolor, me importaba más de lo necesario debía reconocerlo. Aunque había sentido desmoronarme cuando fui consciente de que aquella era nuestra primera pelea. Y después aquella palabra que representaba ahora mi aire vital “Amor”

Akun sonrió contra mi boca

-Tu tío Emmett está rugiendo allá dentro, aún no te hemos contado el plan completo…

Hizo una pausa y supe que estaba pensando en que cuando lo habían intentado explicar Jacob había salido bufando de la casa y yo … tras él.

-Entiendo, debemos irnos ya. Papá me pidió que no perdiéramos demasiado tiempo.

-Bueno, yo no lo veo como malgastado- sonrió de nuevo y volvió a besarme.

***

Akun manejaba firmemente y serpenteaba con las curvas, sus movimientos eran cuidados y precisos. Tío Emmett rugía en el asiento del copiloto por no poder arrebatarle el mando al ave y correr el mismo el automóvil y Ro revisaba las mejores rutas para llegar a salvo y en el menor tiempo hasta el clan Denali.

-Debemos ser cuidadosos y viajar a la velocidad de la luz, no podemos arriesgarnos a caer en una emboscada- había dicho Ro

Desde entonces se había dedicado a estudiar los mapas todo el camino. Indicaba a Akun cada ruta y atajo y evaluaban la posibilidad de salir con vida o morir en el intento. Entonces decidían una, hasta ahora todas habían sido buenas.

Yo por otro lado, vigilaba las enormes sombras, Ladrillo y Arena que viajaban por el lindero del bosque, corriendo como una exhalación siguiendo al pequeño mustang azul. Jacob y Seth no habían perdido el rastro ni un solo instante.

El día anterior mí padre y el tío Emmett me habían contado todo sobre el nuevo Plan B

Los equipos habían crecido, pero iríamos todos. Seguramente era idea del vampiro que se había casado con mi madre que en nuestra patrulla también vinieran Emmett y Ro después de lo ocurrido con el alpha de la mandada de Seth.

-Debemos partir cuanto antes a Denali, ahí encontremos a Nahuel. Ya está a salvo con el clan- había dicho mi padre

-¿Cómo es que Nahuel está en Denali?- pregunté

-Cuando nuestro plan fundamental aún contaba con la participación de Libeth, sabíamos que Nahuel estaba muy lejos. Pensamos que deberíamos empezar a buscarlo en el sur de América. Su hogar

>Sin embargo cuando los planes cambiaron, alguien nos avisó que Nahuel estaba precisamente en Washington

-¿?

Mi padre hizo caso omiso de mi cara estupefacta

-Seth sabía que Nahuel estaba en los límites de Forks. Antes de que tú y Akun llegaran le encontramos tu madre y yo. Hicimos que Tanya , Eleazar y Carmen le cuidaran hasta que fuésemos de nuevo por él. También Nahuel está en peligro, es un aliado nuestro.

Asentí al comprender la gravedad de la situación

-Sigo sin entender qué hacía Nahuel en el estado

Edward miró a su esposa y mi madre me habló directamente a los ojos cuando respondió

-Nahuel está… imprimado

El mundo fue haciéndose un poco borroso por los bordes, ¿imprimado? ¿pero de qu…?

Entonces comprendí la gravedad de la situación. Seth me había pedido ir con Akun y conmigo porque había dicho que “Desde que Leah se imprimó ha sido un fastidido” pero el chico no me había revelado el nombre de la impronta de su hermana.

Oh por Dios, la realidad cayó como balde de agua sobre mi cabeza. Nahuel estaba dispuesto a ayudarnos porque se había imprimado de la loba de la manada de Jacob. La única mujer lobo en La Push.

Una perfecta “O” se dibujó en mi rostro. Entonces emprendimos el camino hacia Denali, nosotros cuatro en el auto de Akun, Mis padres en el volvo de Edward y dos lobos corriendo por el bosque.

Tío Emmett había recibido un mensaje de texto de Tanya que citaba: “Cuanto antes. Nahuel nos ha dicho algo increíble”

Todos supusimos que tenía que ver con algún secreto que su padre, Jonathan sabía a ciencia cierta. Por ese hecho habíamos salido exactamente a las cuatro de la mañana con los lobos pisándonos los talones – o las llantas del auto-

**

Nadie se molestó en disimular su sorpresa cuando Akun y yo nos tomamos de la mano para bajar del auto y entrar en la casa de nuestro clan amigo. Sentí vibrar en mi pecho el rugido animal que provenía desde detrás de mí, donde solamente estaban rezagados los dos lobos y dudaba mucho que hubiese sido Seth quien se molestara en expresar sus sentimientos.

Intenté ignorar el lío amoroso y concentrarme en lo que realmente nos importaba. Aniquilar a la mafia Italiana.

Nahuel se mostró contento por volver a vernos. Y mucho más inspirado cuando supo que Leah estaba a salvo en la reserva. Tampoco se calló el comentario sobre si Jacob y yo no estábamos juntos después de todo.

-Debo admitir- dijo- que pensé que ustedes se casarían antes de que yo pudiera volver a verlos

Akun se tensó y enfadó, mis mejillas se pintaron de rojo escarlata como mis ojos que no habían perdido su brillante tono. Y Jacob respondió:

-Bien, la situación aquí amigo no es sobre sentimentalismos, necesitamos matar unas cuantas chinches-

Una mirada a mi padre, le corroboró a Nahuel que debía mover el tema y regresar al que nos interesaba. Su padre.

-Encontrar a Joham no será fácil, nunca se puede saber dónde está- la voz de Nahuel mostraba arrepentimiento por los comentarios anteriores y una evidente disposición a ayudarnos.

-Tenemos que viajar a Brasil primeramente, ahí podré contactar a mi tía y empezaremos la búsqueda

-Renesmee- me dijo- si logramos localizar a mi padre, estoy seguro que podremos vencer a los Vulturis.

-Nahuel sabe algo, su padre le hizo mención de un asunto un tanto increíble pero que de ser cierto… - comenzó a decir Carmen

-¿Nahuel?- inquirió Akun

Todos lo miramos expectantes

-Joham una vez mencionó una cosa, no sé si debemos fiarnos o no de ello, pero él dijo: “Si la razón humana aceptara que somos sus superiores podríamos controlarlos como títeres. Entonces ellos no se avergonzarían de nuestra existencia”

>Cuando le pregunté a quienes se refería cuando decía ellos, me respondió: “La familia más antigua, los únicos”

Mi padre palideció cuando leyó los pensamientos de Nahuel. El interpelado no se dio cuenta de la expresión de mi padre cuando dijo:

-Joham dijo “La familia Vlad Tepes no se avergonzaría nunca más”

La respiración se nos cortó en ese preciso momento. Era como si una granada invisible hubiera aterrizado en medio nuestro. Las palabras resonaron como eco “Vlad Tepes” “Vlad Tepes”. Los cinco corazones en la habitación también dejaron de latir

2 comentarios:

Gaby dijo...

capitulo nuevoooo wohoooooooo :D gracias vii te quedo buenísimo aunque sigo siendo team Jacob jajajaj! lo siento.
nessie todavía ama a jacob es evidente: como lo defiende, pelea por él, le duele desconfiar y no le puede decir a akun TE AMO golpe bajo jajajajaja TEAAM JACOB!(bueno tengo que admitir que ese beso fue romántico lo acepto {muy bonito, de corazón})
que bueno el comentario que hizo nahuel jajajajajaj morí de la risa!!!
y omg lo mas importante quien sera La familia Vlad Tepes???? ay dios espero que sea la solución de todo....
gracias vii por publicar espero con muchas ganas el prox. cap., también que haya muchos rollos románticos son muy divertidos XD

May_Black dijo...

capitulo nuevo!!! pero sigue sin gustarme la decisión tan segura que cree tener Renesmee, xq se pone celosa? xq le molesta , que Jake deje de luchar x ella, XQ LO AMA!! y no quiere reconocerlo, que eligió a Akun xq no la obligaron a amarlo?? si hasta el reconoce q también traía una leyenda, que el beso de el borró el anterior? bien que se le movió el piso cuando Jake la besó y dijo q el nunca podría ser el 2º!! es una histérica!!! ya lo dije, Akun salió bastante venenoso queriéndole llenar la cabeza en contra de Jake, cuando Jake jamás habló mal de el!! toy nojada!! jaja, igual me encanto como siempre esperando te recuperes prontito y nos traigas mas de esta historia increíble!! Besotes nena ;)