“En la herradura de los montes Cárpatos se reúnen todas las
supersticiones del mundo. En la víspera de San Jorge todos los seres malignos
marchan libremente por el mundo”
Bram Stoker; Drácula
No
es más frustrante estar encerrado que estar libre, en aquel momento me sentía
desesperada por la “libertad” que se me ofrecía a mí a mis amigos y a mi
familia.
Había
regresado aquella vieja costumbre de morderme las uñas. Ninguno habíamos podido
dormir y la luz que se filtraba era mortecina como el olor que predominaba en
toda la estancia.
Los
brazos y las palabras de consuelo que había obtenido no lograban su objetivo.
Cada uno se consumía en sus propios demonios y fantasmas. Habíamos jugado y
ahora estábamos cara a cara con la muerte.
Extrañamente
todos permanecíamos despiertos y mudos. Incluso en aquella media luz, en ese
lugar donde nada bueno aguardaba, en el mismo corazón de Drácula podía sentir
el calor de sus ojos abrazadores. Jacob.
-Que
nos tengan aún aquí les augura algo bueno ¿verdad? De lo contrario todos
estarían tratando de escapar- Su voz se abrió paso por la oscuridad
-No
descartamos la posibilidad, Jacob- se apresuró a responder Eleazar – pero
mantenemos eso que se conoce como esperanza…
No
se escuchó un susurro más y a lo lejos una luz comenzó a surgir de la penumbra.
Era una puerta que se abría lenta y sigilosamente. Nuestros ojos estaban
acostumbrados al color negro predominante y nos encontramos sorprendidos por la
maravillosa presencia de una luz que se abría camino.
Aguzamos el oído y pudimos comprobar el sonido
de pisadas, más de una persona iba a nuestro encuentro.
Teníamos
dos días en aquella celda desde que Joham había decidido llevarnos como
prisioneros. No podíamos ver demasiado ni aún con los dones vampíricos y
metamorfos que poseíamos respectivamente, y también sospechábamos que el
ambiente estaba siendo manipulado. Si no era eso entonces definitivamente había
poderes que estaban fuera de nuestra comprensión.
Sentí
las pesadas manos de mi tío Emmett sobre los hombros y pude ver la luz en los
ojos de Akun cuando me levantó la barbilla con dos dedos y se colocó el dedo
índice sobre los labios.
Moví
negativamente la cabeza, el me miró aún más profundamente. Sabía que ya había
comprendido sus indicaciones de permanecer más que callada, me apartó de la
protección de Emmett y me empujó fuertemente hacía una esquina de la celda.
Justo cuando creí que iba a caer dos manazas me atraparon, sentí su calor
inmediatamente.
Akun
me miró más intensamente que nunca, con esfuerzo logré captar algunos de sus
rasgos. Después el hombre que me sostenía entre sus brazos asintió también en
silencio. No entendía por qué Akun me
estaba empujando a Jacob, mucho menos el
por qué de que confiara en él justo en ese momento. Pero antes de volver al
lado de Emmett donde también estaban ya Ro, Eleazar y Nahuel confirmé que Akun
me amaba.
Los
cinco formaron una hilera delante de la reja, o donde creíamos que era el
comienzo de la jaula. Esperando que lo que fuese que se movía con las sombras
apareciera pronto. Me abracé a Jacob en un acto reflejo, un olor a putrefacción
aún más potente del que ya existía me produjo una fuerte arcada. Jacob tomó mi
cara entre sus manos e imitó la acción de Akun, a diferencia de que esta vez su
dedo índice se colocó sobre mis labios y no los de él.
Las
piernas me temblaron ridículamente. No podía ser posible que aún en aquella
situación mi corazón siguiera luchando. Asentí a Jacob y me alejé de su abrazo.
Justo en ese momento algo jaló de mi brazo izquierdo y me apartó por completo
de él. Grité y la luz se encendió.
***
Su
piel era más blanca que la de ningún vampiro que hubiese visto antes. Sus
cabellos negros, se rizaban al caer como una cortina oscura sobre sus hombros
cuadrados. Poseía una nariz aguileña y un bigote perfectamente recortado. Sus
ojos eran de un escarlata oscuro y sus cejas pobladas le conferían vida a su
mirada porque Vlad Dracul tenía la
mirada más fría que hubiese visto en mi vida.
Vestía
pantalones rojos y camisa blanca, una capa larga y azul resbalaba sobre sus
largas piernas y descendía en picada como una cascada hasta el suelo. No me
pasó por alto la espada que envainada se mantenía en su costado. Era el
perfecto retrato de una imagen sacada de “google”
Dolía
verlo porque imponía su presencia, aterrorizaban sus hermosas facciones y el
porte que manifestaba la muerte que cargaba dentro me hacía querer morir en ese
instante.
Nos
encontrábamos en efecto en una jaula, cada barrote estaba decorado con símbolos
religiosos, y había una puerta justo en la esquina en la que hacía unos minutos
me encontraba. Podía ver en el interior de la “prisión” a mis amigos y a mi
familia. Pero por más que quisiera articular una palabra no podía, me mantenía
al lado de una leyenda mítica para mi especie y el miraba con devoción a los
vampiros y metamorfos que se encontraban dentro. Como un águila mira un ratón.
Joham
se encontraba de pie del otro lado de la jaula, mantenía una mano apoyada en
uno de los barrotes, hasta ese momento descubrí que lo que Drácula veía no era
a su “caza” sino la mano de Joham. No pude evitar preguntarme el porqué pese a
mi nerviosismo
-¿Procedemos?-
increpó Joham y retiró inmediatamente la mano de la jaula, como si hubiese
advertido que el Conde le miraba y sintiera… ¿vergüenza?
-Tienes
los honores- habló el vampiro que se encontraba a mi derecha.
Su
voz era potente, lastimaba y enamoraba a la vez, se mantenía dulce y áspera
también, como si no encontrara la manera de hacerla “encajar”
Se
acercó a mí y mirándome fijamente me
dijo: “No vuelvas a gritar. Sígueme”
Tragué
saliva, y comencé a mover un pie después de que él se encaminara delante de mí.
Sus pies parecían no tocar el suelo. Era como si una neblina le mantuviera a
“flote”
Por
inercia le seguía aún sin estar completamente segura de que “mi equipo” me
siguiera.
La
estancia en la que entramos era oscura como boca de lobo. Una a una, pequeñas
luces titilantes comenzaron a encenderse alrededor, la visión de cada uno
comenzaba a adaptarse a la negrura de aquel sitio.
El
Conde estaba ya sentado en una gran silla de oro, las vestiduras y decorados
eran de terciopelo y su figura se realzaba majestuosa contra el salón que
carecía de muebles.
Drácula
esbozó una sonrisa, Joham fue a situarse a su lado y Akun me tomó de la mano en
un instante que ni siquiera noté.
Los
ojos del vampiro se posaron sobre cada uno y después más allá de nosotros,
sentimos un frío espectral recorrernos de pies a cabeza. Una fina capa de
niebla se desplazó por la estancia, Akun me pegó a su cuerpo de una manera más
que protectora, entonces pequeñas partículas, como volutas de polvo y diamante
comenzaron a materializarse muy cerca de donde se encontraba el conde.
Tío
Emmett y Eleazar soltaron una exclamación ahogada, que no era necesaria dado
que nosotros respirábamos a voluntad, pero la emitían para demostrar el grado
de sorpresa y miedo que tenían.
Jacob,
Nahuel y Ro permanecían con los ojos desencajados mirando atontadamente hacía
la figura del vampiro. Fue entonces cuando comencé a imitar su gesto y me
encontré con que las volutas se habían convertido en algo más que sólo “polvillo
de hadas” como me habían parecido a simple vista. Se juntaban una a una como si
tuviesen vida propia… porque la tenían.
Materializados
ahí estaban muy erguidos, y con la piel tan blanca como la del mismo conde Vlad Călugărul y Radu el Hermoso.
Nos miraron sin ninguna pizca de compasión. La
misión en la que estábamos envueltos era completamente Kamikaze.
-Amo la oscuridad y la sombra y anhelo estar solo con mis pensamientos el tiempo que
pueda- esa frase rompió el silencio y
todos supimos que la voz a la que pertenecían aquellas palabras no podía ser
otra sino del mismo Conde Drácula.
-No he tenido el tiempo para presentarme y
lamento mucho que hayan tenido que pasar una noche en las cloacas, no es así
como solemos tratar a nuestros invitados- el vampiro volvió a sonreír.
-Lamentamos mucho traerles de esta manera, mis
hermanos y yo les presentamos una sincera disculpa- Nadie dijo nada mientras él
se levantaba de su asiento.
Siempre me había maravillado de la rapidez de los
de mi especie pero en aquel momento incluso el vampiro que poseyera el don de
la velocidad más prodigioso, palidecería comparado con los movimientos del
Conde.
Lo tuvimos frente a nosotros en una micro milésima
de segundo y ni siquiera habíamos notado su ausencia en el “trono”
-Me siento impresionado ¿saben? Ninguno ha
abierto la boca en todo este tiempo. Quisiera saber si soy tan Vampíricamente
impresionante como para haberlos dejado sin habla.
Sus dos hermanos y Joham rieron pero nadie de nosotros
los imitó
-¿Y bien?- instó a seguir el Conde
-No podemos mentirle Conde, estamos temerosos-
respondió la valiente voz de Eleazar.
Le di gracias a todos los cielos por haber sido él
quien respondiera y no mi tío, o Akun, o Jacob
-Sí, deberían tener miedo. Pero ahora sólo quiero
hablar
Drácula
se paseó por la sala y se situó a un lado de Ro.
-Admito
que su presencia aquí no es de mi agrado, mucho menos sus malsanas existencias-
aquellas últimas palabras las pronunció con desprecio
Y
se repitieron en mi cerebro MALSANAS EXISTENCIAS
-Admito
también que tenerlos aquí representa una aberración a mis costumbres, a mis
normas, a mi vida.
El
pecho de Akun subía y bajaba y su mano se aferró con fuerza a la mía, manteniendo
la calma
-Pero
me era necesario conocerlos- sus ojos nos miraron y se detuvieron en los míos,
fríos y calculadores me recorrieron despacio- CONOCERLA- terminó
Drácula
movió negativamente la cabeza y se acercó a mí, cuando estuvo a escasos
centímetros de mi rostro oí bufar a Jacob,
y sentí que Akun temblaba como maraca, trasmutaría si el Conde no se
detenía.
-Tú
eres el colmo de la burla infringida a mi linaje, Renesmee Cullen. Eres la
degeneración personificada de la especie más poderosa, con la más débil. Y sí,
si cariño, eres repugnante.
El
temblor en Akun cesó y un ave enorme y negra Salió volando justo a la cara del
conde. Pero este se había esfumado igual que neblina, más bien él era la
neblina.
Su
carcajada se filtró entre las paredes y sus hermanos comenzaron a imitarlo,
justo en el momento en el que cesaron las risas, el ave cayó al suelo y se
transmutó en mi novio. Akun reflejaba severos signos de esfuerzo y daño físico.
Corrí hacia el pero una mano poderosamente fuerte me lo impidió. El Conde se
materializó delante de mí y Jacob me apretó contra su pecho.
Leí
en sus ojos un claro “no lo hagas” entonces comprendí que Akun y Jake habían
llegado a un acuerdo mudo cuando estábamos en la jaula. Si algo sucedía Jacob
debía protegerme, contra todo, contra mí misma.
-Tranquila,
tu preciosa ave metamorfa estará considerablemente “bien”- Drácula puso los
ojos en blanco en un claro signo de exasperación
-No
deberían permitirse sus estúpidas emociones humanas, ustedes no son mortales,
si bien, sus razas se han degenerado su especie es poderosa y no deberían
rebajarse a los sentimentalismos.
Los
tres vampiros legendarios hicieron una mueca de asco
-Vampiros
estúpidos todos, vampiros “amorosos” son la putrefacción misma de nuestro
género. Mira que procrear con la comida y permitir más degeneraciones- hizo un
ademán y me señaló directamente.
-Ya
veo el enojo de ese infame, su nueva raza es mucho más poderosa porque no puede
ser dañada tan fácilmente pero su “familia” como la llaman, compuesta por toda
clase de enigmas- y en ese punto miró a Jacob y a las aves- es aún más poderosa
que los vampiros que brillan.
Drácula
nos rodeo sin hacer el menor ruido en el mosaico que cubría el piso.
-¿Qué
es lo que quieres de nosotros?- preguntó una voz firme y arrolladora
-Eres
fuerte ave, pero tus sentimientos, tu inútil amor te hacen flaquear, y ¿para
qué? ¿A caso no ves que siempre estará dividida? – le respondió el vampiro
Akun
se levantaba con esfuerzo del suelo. Joham le había acercado una bata, y
rengueando se unía a nuestras filas de nuevo
-Este
amor estúpido como tú lo llamas, es lo que nos mantiene de pie aquí y ahora- le
respondió
El
Conde me miró y después a Jacob
-¿Y
para qué prestarles atención? Ustedes son jóvenes y no ven lo que yo puedo.
Pero les aseguro que ella jamás podrá ser dichosa con ninguno aunque haya
decidido ya. Su raza no puede seguir adelante ¿imaginan que engendro traerían
al mundo?
Por
un momento todo me dio vueltas. Me faltó el aire y el corazón me comenzó a
latir más de prisa. Drácula estaba hablando sobre… mis hijos.
-Por
un lado está Jacob Black- dijo sin inmutarse y ninguno de nosotros lo hizo
tampoco.
A
estas alturas sabíamos que Drácula Vlad Tepes sabía millares de cosas más para
tener que preocuparnos porque sabía nuestros nombres
-Si
Renesmee lo eligiera, ¿qué resultaría? Mitad humano, mitad vampiro, mitad
hombre lobo. Una aberración
Estaba
conteniendo mi rabia, y mis ganas de gritarle que se fuera al carajo que podía
quitarnos la vida. Pero no podía llamar aberración a nadie de quienes representábamos
a mi familia. Jacob me apretó la mano en un puño y pude ver un brillo, un
brillo de tristeza en sus ojos oscuros. Porque a pesar de todo sabíamos que
Drácula decía la verdad
-Y
por otro lado, si sigue contigo nunca podrá siquiera aspirar a esa fantasía.
-¿Qué
quiere decir con eso?- preguntó Akun encolerizado. Tío Emmett le puso una mano
en el hombro
-Lo
he dicho, sus mentes están limitadas y sus vidas aún son como las de un niño
humano. Deben aprender, deben practicar y se han rehusado, han rehusado su
naturaleza. Un no muerto no ama, un no muerto destruye
Tío
Emmett dio un paso adelante y el Conde detuvo su andar hasta quedar frente a él
-Has
insistido mucho en el odio, porque es lo contrario del amor por el cual nos
condenas. Dime Conde Drácula ¿Qué es exactamente lo que quieres destruir?
Los
vampiros originales se materializaron juntos frente nuestro. Los tres eran
hermosos y perfectos y no había comparación entre ellos y nosotros. Sin embargo
sus miradas eran frías y llenas de muerte y destrucción.
A
una voz declararon: Vulturi
Así
que bien teníamos un objetivo en común, pero no podíamos decir que estábamos dentro
del mismo barco.
-Por
aquellos que me traicionaron comenzará el fin de todos ustedes- añadió.
El
brevísimo remanso de paz que hubiésemos sentido desapareció en un segundo
-¿Qué
es lo que quieres de nosotros?- preguntó Jacob. Un Jacob tranquilo, uno
controlado, expectante.
-Nosotros
no los necesitamos Lobo. Ustedes nos necesitan a nosotros, si es que quieren
recuperar a tu padre- dijo el vampiro
-¿Cuánto
nos costará?- añadió el Quileute
Drácula
sonrió
-Estarán
dispuestos a entregar todo lo que poseen, porque saben que sin nuestra ayuda
están perdidos.
-Me
pregunto cómo será eso- La voz de Nahuel aparecía por primera vez en la
conversación
-Nahuel…-
intervino Joham. Intentando apaciguar el daño que había hecho su hijo
-Mapuche,
no conoces nada más allá de tu propio bienestar, pero tu padre puede decírtelo,
si eres tan su hijo, deberías saber que no se puede jugar con la dinastía Vlad
Tepes
Drácula
comenzaba a perder la compostura. Si mirabas bien podías darte cuenta que el
poder que emanaba no era completamente cierto, había algo en el que le hacía más
vulnerable que a todos nosotros. Quizá no eran sentimientos, pero sí que fuera
lo que fuese era mucho más fuerte….
-Claramente
están en desventaja- señaló Nahuel – Son Vampiros originales, y si la historia es
cierta….
-¡Todo
es cierto!- gritó el Conde- No en vano Bram supo de mi existencia, no en vano
lo dejé marchar. Era una advertencia, y ahora todos se han burlado de ella
-Lo
hacen porque se creó…- comenzó a hablar Eleazar pero el vampiro original fue a
callarlo tomándolo del cuello con dureza
Ahogué
un grito desesperado
-Porque
ese infiel- Drácula señaló a Joham- y otros idiotas como él, pensaron que sería
mejor si ayudaban un poco creando aberraciones como los híbridos…
-¿A
qué le teme conde?- preguntó nuevamente el mapuche
Drácula
lo miró extrañado
-Todos
aquí sabemos qué fue lo que originó la raza de los vampiros que brillan a la
luz del sol. Las “degeneraciones” a su especie como las llama. ¿No fue acaso su
misma sangre la que blasfemó contra usted?
Drácula
sabía que Nahuel le había referencia a Mircea el hijo no reconocido del Conde
que había decidido no seguir los pasos de su padre al intentar quitarse la vida
pero al no poder y secarse de “alimento” mordió a tres jóvenes que retaban a su
suerte.
-Mi
sangre se corrompió desde que lo engendré-
En
su declaración mostraba más el odio que sentía por su hijo y por su deserción y
la creación de Aro, Cayo y Marco de lo que hubiésemos imaginado.
-Entonces
para usted, esta vida y estas reglas lo son todo- dije y me sorprendí habiendo
hablado
-Debería
serlo para todos, corrompidos o no, pero es algo que ustedes no han de entender
Renesmee
Drácula
fue a sentarse y sus hermanos se evaporaron nuevamente como volutas de humo que
quedaron suspendidas en el aire.
-Vayamos
sin rodeos “Conde Drácula”- me solté de la mano de Jacob y ante la mirada de
extrañeza de todos me acerqué con pasos decididos hasta su “trono” – Tú y tus
hermanos necesitan un equipo para derrotar a esa maldita mafia.
-Nosotros
queremos recuperar a Billy, a mis tíos Alice y Jasper y vengar la muerte de Tía
Rosalie, pero como bien has remarcado, somos débiles contra ellos. Los
necesitamos a ustedes y ustedes necesitan de nosotros aunque declares lo
contrario, si no fuese así dime ¿Por qué estamos aún con vida y delante de ti?
***
Radu el Hermoso
y Vlad Călugărul escoltaron
contra su voluntad a Eleazar, Emmett, Nahuel, Joham y Ro a las cloacas. El
Conde declaró que quería estar en presencia sólo de Jacob, Akun y mía
Al final así era
como debía ser, la batalla era mía y yo debería enfrentarla con o sin ayuda,
pero mi corazón se alegraba de saber que contaba con los dos para sostenerme
ante ese momento.
-Su guerra no ha
pertenecido a la especie nunca, se instauró desde el día en que fuimos
traicionados, y ahora por fin podemos reclamar lo que por derecho es nuestro.
-No aspiramos el
mundo de no muertos como lo había soñado antes, aspiro el reconocimiento que se
me ha quitado, eliminar las depravaciones y eliminar a todo quien se interponga
en mi idea de reino.
-Nosotros somos
parte de esa degeneración Conde- apuntó Jacob
-Y no quedarán
impunes, pero no les será cobrada con la muerte, sino con un mayor sacrificio.
Los tres nos
miramos sin comprender una palabra
-Sea cual fuere
la elección que realices, muchacha, no puedes procrear ningún ser porque será
el fin de nuestra alianza.
No tenía planes
de tener hijos, y ya me había decidido por uno de ellos, pero al ver a Akun y a Jacob me di cuenta que
aún mantenían la esperanza por ser elegidos, y al mismo tiempo por formar una
familia.
-Siempre serás
una híbrida tanto en cuerpo como en alma. Y será hasta el momento en el que vea
a Aro y su séquito de sanguijuelas traidoras incinerándose cuando se podrán ver
liberados de esta alianza.
-¿A qué tipo de
alianza te refieres? – le increpó Akun
-La Orden del
Dragón se pone en marcha desde ahora, el plan es sencillo. Derrocar la mafia
Italia, volver al poder, restaurar el orden vampírico y sobre natural. En esto
consiste su participación. Estar a mi disposición
>Únicamente
deberán recordar que no pueden violentar mis tratos, si ella llegase a
engendrar un monstruo más, todos ustedes serán los primeros en pagar la
desgracia.
-Por mi parte te
doy mi palabra, Renesmee ha decidido estar al lado de Akun- un Jacob maduro muy
maduro fue el que pronunció aquellas palabras
Drácula río
-Uno puede
fiarse tanto de los lobos, como de las mujeres- dijo y desapareció con la
niebla
1 comentario:
Siiiiiiiiiiiii, que capitulo IMPRESIONANTE!!! Vii valió mucho la espera una alianza con Drácula?? q mieditooo, jaja, pero esa condición podrá ser cumplida ?? mmm, digo x el comentario que le hizo Drácula a Jacob... y q con Akún no podría tener hijos?? al menos eso entendí yo!! Ay mi Vii gracias x este capitulo hermoso!! pero x favor no tardes tanto en publicar, acá estaremos esperando!! Besotes =)
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